jueves, 26 de agosto de 2010

Pero no soy una ardilla

Tengo mucha ropa. Corrección: Tengo demasiada ropa. Corrección de la corrección: Tengo DEMASIADA e INNECESARIA ropa. Llámenle adicción, llámenle llenar vacíos, llámenle complejo de ropavejero, pero si los 4 clósets y 7 cajones que ocupan mis trapos no es un indicio de "hoarding", yo no sé qué es.
Digamos que si yo fuera una ardilla y mi ropa fueran bellotas, estaría preparado para sobrevivir 5 crueles inviernos y me sobraría para el recalentado de primavera. Pero no soy una ardilla.

En mi cabeza, no cabe eso de tener "demasiadas" playeras rayadas, o "demasiadas" camisas a cuadros, o "demasiados" cardigans. Siempre encontraré la forma de decir algo como:"Sí, tengo 5 playeras de rayas azules, PERO no tengo una playera de rayas azul VERDOSO."
Una de mis últimas adquisiciones, una versión Inditex prácticamente exacta de la infame playera Balmain, me costó lo que cuesta una Vogue (WIN!). Sin embargo, el arrepentimiento post delirium tremens y la sabiduría milenaria de un amigo me hicieron cuestionar mi gasto (y gusto): "¿Realmente necesitas una playera apolillada?"- me preguntó. No. Nadie necesita una playera apolillada. Y ya siendo más realistas, ¿por qué alguien habría de pagar por una playera apolillada?...(FAIL).

Lo peor de todo no es eso. Lo peor de todo es que no importa cuántas opciones tenga para escoger, ni cuánta ropa nueva compre, invariablemente estiraré mi brazo y tomaré la misma playera, jeans y tennis de siempre. Dios sabe que pulí la suela de mis Converse blancos hasta su último suspiro, y aún asomados 3 de mis 5 dedos del pie y su color más cercano al gris rata que al blanco que alguna vez fueron, los llevé al doctor de calzado con la esperanza que los salvara de su cruel destino. Cual escena de Grey´s Anatomy, el dr McStinky me dijo "Uy mano, ya es hora de que te compres otros" a lo que yo respondí indignado "¡Zapatero a tus zapatos!" y con toda la tristeza del mundo, tuve que deshacerme de ellos y darles un final no tan digno en una bolsa costalitos.

Dicho esto, les presento a mi playera gris. Me gusta pensar que la sigo usando después de más de 6 años porque en ella conocí al amor de mi vida, lo que la hace 50% fibras de algodón / 50% fibras sentimentales. Eso o una necesidad patológica de aferrarme al pasado...
Si la razón es la segunda, entonces tendría mucho sentido el por qué colecciono ropa como si coleccionara timbres postales o cucharitas. 
Aún guardo la mayoría de las cosas que compré hace 7 años durante mi "intercambio universitario" que confundí con "siete meses de shopping spree" y confieso que no uso la mayoría desde hace como 5. Aunque creo que generalmente las cosas que compro no tienen fecha de caducidad (exceptuando, quizás, aquellos jeans acampanados con estoperoles que ahora hacen feliz y/o fashion victim a un huérfano de Calacoaya), siendo honesto, la mayoría solo ocupan espacio físico y emocional. Mis fedoras parecen más un adorno de pared que para la cabeza. Mis tennis, casas del Infonavit para las arañas. Mis playeras ya podrían pasar por vintage...
Decidí entonces hacer una limpieza profunda y honesta de mi clóset (tipo exfoliación de impurezas). Descartadas están las playeras XS con ventilación axilar y estampados como "Rebelious High" y "My mom says I´m a good guy". También las fedoras, que sé que le vendrán muy bien a la cabeza de cierta lesbiana que se jura Justin Timberlake ("haz el bien sin mirar a quién", dice mi madre).
Confieso que de filántropo tengo lo que tengo de futbolista y filósofo, pero amanecí con espíritu benefactor y con ganas de hacer felices a los huérfanos malvestidos de la Madre Teresina de Calacoaya.

¿En cuanto a seguir comprando? Me es muy difícil tener un billete de cien pesos sin imaginarme a Nezahualcóyotl diciendo: "¡TEJUILKONI EJÉCATL!" (traducción: "úsame, gástame"), pero prometo ser más prudente y selectivo en mis gastos. Por ejemplo, en lugar de comprar una playera apolillada, comprar una familia de polillas y apolillar una que ya tenga...

"Me llamo Daniel y soy shopaholico..."

Dos de las cosas que más atesoro: Una pulsera que uso todos los días desde hace 7 años y mi leal playera gris

Madrid 2003: Un atuendo cuestionable que todavía tengo 
(pero ya no uso)

Una ardilla...

2 comentarios:

  1. personalmente, yo soy la adicta a las rayas azul marino/beige no.2 "tu rival". a mi me pasa que digo: "PEEEERO no tengo una playera de rayas azules de 4 milímetros de ancho". dani, amo tu blog atte analurdo.

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  2. Hola! Buscando justamente al diseñador de Maison Belen me encontré con tu blog. Quisiera platicar contigo pues estoy interesado en unas ilustraciones. Por favor contáctame! acorreu@gmail.com
    acorreu@idmexico.net

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